Paliza Clásica

En la tarde de ayer se produjo un nuevo clásico que quedará en la mente de todos los hinchas, tanto de Peñarol, como de Nacional, ya que se efectuó una de las goleadas más abultadas de la historia, con un 5 a 0 a favor del aurinegro.

Desde el inicio el carbonero fue más, planteando un fútbol que ni el más optimista de los hinchas podría haberselo imaginado, jugando a un toque, tirando caños y tacos, fútbol al mas alto nivel y ya a los 40 segundos tuvo la primer triangulación por el sector izquierdo de la defensa tricolor (que seria el sector por donde atacaría toda la tarde y volvería loco a la defensa del bolso) que pudo haber sido la apertura en el marcador si Aguiar si su tiro no se hubiese ido desviado.

A los 11´ la apertura en el marcador, pase del Tony, Rodriguez anticipó a Benegas, llegó a la línea final y puso el pase al medio para que Marcelo Zalayeta la mandara al fondo de la red.

Entre los 20 y los 30 minutos tal vez estuvieron los mejores momentos del bolso, que tuvo sus aproximaciones mas cercanas al arco custodiado por Castillo, primero con un tiro libre de Munúa que se fue cerca, y un tiro que se fue desviado de Mascia que se fue lejos, luego de que Valdéz la perdiera con Cruzado, en lo que fue el único error defensivo de Peñarol en todo el encuentro.

Cuando se iba el primer tiempo llego el segundo, una hermosa triangulación de Peñarol que apenas pudieron sacar al corner, centro de Pacheco y cabezazo de Macaluso que se desprendió de la marca de Darwin Torres para sacar una ventaja merecida y sentenciante.

El segundo tiempo Nacional salió con cambios, en un intento de Pelusso de cambiar lo que estaba haciendo su equipo, con el ingreso de el Chino Recoba y el Morro García por los juveniles Pereiro y De Pena que no pudieron hacer nada cuando estuvieron en cancha. Pero a los 3´ocurrió lo peor para el el tricolor, una seguidilla de jugadas que terminaron el partido: primero la expulsión merecida de Darwin Torres por una falta contra el Tony, y a los dos minutos el gol de el Japo Rodriguez luego del centro del 8 y el error en la salida de Munua.

El "Ole" caía de la Amsterdam y por los alto parlantes del estadio ya se oía que la parcialidad tricolor debía retirarse cuando termine el partido (asumiendo que el encuentro ya estaba cerrado).
El aurinegro se florió con el 4-0 luego de una jugada de izquierda a derecha, recibió Zalayeta, amortiguó con Orteman que levantó el centro para que Aguiar convirtiera de cabeza.

El quinto pudo llegar antes, con dos jugadas de el Lolo Estoyanoff si no fuese por su mala puntería en el primero y el palo en la segunda. Pero llego a los 43´ con una jugada magnifica con mas de 30 pases, centro que toca Munua la bajo Nuñez que jugo al medio para una nueva definición de Aguiar.

A lo último el partido terminó un poco caldeado, debido a 2 imprudentes patadas del paraguayo Benegas hacia Estoyanoff que debió haber terminado con la expulsión del jugador guaraní, que produjo una aglomeración de los jugadores, algún que otro empujón y reproche, y el pedido de Arismendi (el mejor jugador de Nacional en el partido) hacia el juez de que termine el partido para que no hayan mas inconvenientes.

5-0 el resultado final, resultado justo, histórico, hasta con el sabor de que si Peñarol hubiese estado mas fino en la definición, habría terminado en la mayor victoria clásica de toda la historia.