El número uno del mundo jugó con mayor concentración que el partido de semifinales en el que superó con algunos problemas a Pablo Andújar, y estuvo mejor parado y con mayor control del partido. Por tanto su rival, fue mucho más agresivo y atacó más sobre la última línea, como ya había avisado Nadal en la previa a la final, y lo que lo obligó a cometer varios errores que le terminaron costando el primer set.
A pesar de haber ganado con mayor tranquilidad el primer set, en el segundo set se vió obligado a forzar una muerte súbita ante el número 54 del ranking, quién tuvo uno de sus mejores rendimientos en su servicio, metiendo cuatro saques directos en el primer set y seis en éste.
La potencia física y la fuerza mental del mallorquín, superaron la visible lesión de espalda protegida por un aparato de vendajes, y un partido que pudo ser más complicado lo terminó superando en el segundo set, demostrando porque es el número uno del ranking ATP.
Este es el título número 62 para Rafa, que suma su tercer triunfo en tierras brasileñas, y con esto suma 500 puntos para seguir aumentando la distancia sobre su perseguidor y exnúmero uno, Novak Djokovic. Por el lado de Dolgopolov, sumó 300 puntos para su clasificación.
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